La artista gaditana consigue despedir su primera gira con sold out en todos sus conciertos

El pasado 14 de marzo Lara Fernández, más conocida como Judeline, celebro el último concierto de su gira por España. Aunque no fue la única razón por la que la artista paso por Málaga, también la pudimos ver en la alfombra roja del Festival de Málaga, e inaugurando la gala del mismo.

La sala Paris 15 tuvo el placer de ser testigo de esta noche tan especial, siendo la mayor donde la artista ha actuado. El concierto empezó de la mano de nosoymeri, quien hizo de telonera e interpretó sus temas más conocidos, con el acompañamiento de un piano y una guitarra, se hizo con todo el público cuando canto la mítica canción de Daddy Yankee La despedida.

Y ahora si, vestida de blanco apareció en el escenario, como un ángel caído del cielo, cantando la primera canción de su álbum bodhitale. Judeline no presenta solo un disco, presenta un universo.

Bodhiria mezcla lo divino con lo terrenal, la espiritualidad con lo físico, algo que se percibe aún con más fuerza en el directo. Es imposible no mencionar la coreografía de su bailarín, Héctor Fuertes, que hizo del espectáculo algo mucho más tangible, en canciones como BRUJERIA! y angelA, dando cuerpo a las letras y a todo lo que la música busca transmitir. Junto a Lara y el resto del equipo crean una atmósfera mágica e hipnótica.

También la pudimos ver interpretando Tonada de luna canción del famoso cantante venezolano Simón Diaz, no es la primera vez que deja ver sus raíces, en canciones como JOROPO escuchamos esa melodía tan característica de Venezuela, esencia de la artista. Aunque el momento más emocional de la noche llegó de la mano de Zarcillos de plata, canción que robo el corazón de todos sus fans, y de los no tan fans, desde el minuto uno.

En Andalucía no decimos pendientes, decimos zarcillos.

La gran noche de de Judeline en Málaga fue un despliegue de arte y emoción, dejó claro su crecimiento, pero también fue el cierre de una etapa. Una interpretación llena de matices y conexión con el público, convirtió el concierto en una experiencia inmersiva.

Con la fusión de su voz, puesta en escena y los elementos visuales reafirmó su identidad artística, consolidándose como una de las propuestas más únicas del panorama actual.